El seleccionado argentino, sin Lionel Messi ni Lionel Scaloni, derrotó por 2 a 1 sobre Chile, en la altura del desierto de Calama, y extendió su invicto a 28 partidos. El seleccionado del país trasandino, se caracterizó por la brutalidad y la violencia constante contra sus pares de la selección nacional albiceleste.
Por la fecha 15 de las Eliminatorias Sudamericanas, Ángel Di María, el capitán ante la ausencia de Messi, abrió el marcador a los 9 minutos del primer tiempo, lo empató para Chile el inglés Ben Brereton Díaz, a los 20, pero a los 33, Lautaro Martínez volvió a poner en ventaja al equipo que fue dirigido por Walter Samuel y Roberto Ayala.
A pesar de la ausencia de Messi por primera vez en el asegurado camino a Qatar, el seleccionado argentino se hizo fuerte en la altura de Calama (poco más de 2.200 metros sobre el nivel del mar) y arrancó el año mundialista con una importante victoria que lo mantiene en la segunda posición con 32 puntos en 14 fechas jugadas.
El invicto de la «Scaloneta», sin embargo, alcanzó los 28 partidos con 18 victorias y 10 empates y afirmó su condición de ser el seleccionado del mundo con la racha más extensa de imbatibilidad de la actualidad.
Chile, por su parte, complicó sus chances de clasificarse a la próxima Copa del Mundo ya que con 16 puntos se ubica en la séptima posición y podría quedar octavo si Bolivia, su próximo rival en la altura de La Paz, derrota mañana a Venezuela, como visitante.
La «Roja» ya quedó afuera de Rusia 2018 siendo vigente bicampeón de América y ahora está obligado a ganar sus próximos tres partidos (Bolivia, Brasil y Uruguay) para mantener sus posibilidades.
Luego de un arranque de ida y vuelta, Argentina encontró rápidamente la ventaja y la tranquilidad antes de los primeros quince minutos en la prodigiosa zurda de Ángel Di María.
A los 10 minutos, el capitán argentino recibió la pelota en el sector derecho y ante la marca de tres defensores chilenos sacó un zurdazo inatajable para el arquero Claudio Bravo que se metió al lado del palo derecho.
Como contra Uruguay en Montevideo, «Fideo», el hombre de los golazos importantes, hizo otro más que le permitió abrir el marcador al seleccionado argentino.
El equipo, que fue dirigido por Walter Samuel ante la ausencia de Scaloni por seguir dando positivo de Covid-19 en los testeos, había empezado mejor con buenas y limpias salidas de Lisandro Martínez y con ataques profundos por la izquierda con el tándem Nicolás Tagliafico, Alejandro «Papu» Gómez y Nicolás González.
Parecía que Argentina dominaba el partido pero Chile reaccionó y aprovechó un flojo retroceso de la defensa para empatar el encuentro.
El mediocampista Marcelino Núñez metió un preciso centro a la espalda de Nahuel Molina y el delantero inglés Ben Brereton Díaz definió con un gran cabezazo de emboquillada por encima de Emiliano Martínez.