Por Maximiliano Borches. A doscientos cincuenta y tres años del nacimiento, y doscientos tres de su paso a la inmortalidad, la concepción de patria del general Manuel Belgrano, continúa hoy en pugna con la concebida por oligarcas, (neo) liberales y tilingos, que en más de una ocasión se apropian de su bandera, y hasta le cambiaron el azul original por el actual celeste. Lejos de ser un patriota “edulcorado”, como lo presenta la historiografía liberal, Belgrano fue el primer industrialista de nuestra historia, uno de los más insistentes en aplicar una reforma agraria y junto a San Martín y otros, proponía la creación de una “Monarquía Inca”. Verdadera concepción estratégica en su época, que no solo hubiese integrado a los pueblos originarios con los criollos. Hubiese apuntalado la conformación de la patria grande sudamericana. Una bella zamba, escrita por el poeta León Benarós, “Adíos, General Belgrano” –que al final de la nota reproducimos- dice en una de sus estrofas: “Adiós general, ya me voy/ toda la tierra se vuelve Patria / Usted, para darle gloria / le crea, la bandera azul y blanca”.
Evidencia científica que certifica que las primeras banderas nacionales fueron azul y blanca
En 2017, científicos del CONICET en el Centro de Química Inorgánica (CEQUINOR), junto a investigadores de la Universidade Federal de Juiz de Fora (Brasil), analizaron hebras de la bandera que según algunos historiadores es la más antigua conservada, la del Templo de San Francisco en Tucumán., donada por el entonces gobernador de esa provincia, Don Bernabé Aráoz, un hombre muy cercano a Manuel Belgrano. Concluyeron que los extremos superior e inferior eran azules, más precisamente de un tono correspondiente al pigmento azul de ultramar.
Conclusión
Hoy, al igual que hace doscientos años, cuando Belgrano moría en la absoluta pobreza, despreciado además por el centralismo porteño de Bernardino Rivadavia y otros, los últimos eventos de la política nacional, vuelven a demostrar que no pueden ser tomados con tibieza. Las meras declaraciones en este país, no sirven; hay que tomar acciones concretas. “Mejor que decir, es hacer. Mejor que prometer, es cumplir”, nos legó como profunda enseñanza política, y de vida, Juan Domingo Perón.
Letra de la zamba: “Adiós, General Belgrano”
(Recitado)
Al alba ya está Belgrano
alertando a sus soldados.
¡Ah, generalito lindo,
por bueno y sacrificado!.
(Cantado)
Adiós, general Belgrano,
peregrino de la Patria,
memorias le traigo yo,
de Tucumán y de Salta.
Al tope lo van nombrando,
seguro, la bandera azul y blanca.
Largándose Norte arriba,
todo el pueblo se le suma,
ganoso de libertad,
¡sin desertársele nunca!.
¡Que importa que la perdimos,
en Huaqui, Vilcapujio y Ayouma!,
Adiós general, ya me voy,
toda la tierra se vuelve Patria.
Usted, para darle gloria,
le crea, la bandera azul y blanca.
Usted, para darle gloria,
le crea, la bandera azul y blanca.
¡Qué lindo cuando en Rosario,
junto casi a las barrancas,
vecinas del Paraná,
su bandera desplegaba!.
El sol alto de febrero marcando,
los caminos de la Patria.
¿Se acuerda cuando el relevo,
el gobierno le mandaba,
y en la posta de Yatas,
con San Martín se abrazaba?.
¡Qué lindo que se amistaran dos hombres,
entendiéndose sus almas!.
Adiós general, ya me voy,
toda la tierra se vuelve Patria.
Usted, para darle gloria,
le crea, la bandera azul y blanca.
Usted, para darle gloria,
le crea, la bandera azul y blanca.
Letra: León Benarós
Música: Carlos Di Fulvio