Como era de esperarse, los productores sojeros aún conservan 16.4 millones de toneladas de la oleaginosa, valuada en alrededor de U$S8 mil millones, en momentos donde la crisis económica se profundiza a diario y la falta de dólares frena el normal desarrollo productivo y comercial en la Argentina. Ahora, le piden al Gobierno nacional una nueva baja de retenciones en torno a los 10 puntos y nuevos Incentivos impositivos”. El Ejecutivo las rechazó.
En momentos que la Argentina necesita conseguir de manera inmediata, dólares para poner en funcionamiento parte de su entramado productivo y comercial, y a la vez que los precios internacionales de la oleaginosa alcanzan su mejor valor en al menos dos años y medio, los productores sojeros continúan especulando, para que se profundice la crisis política del actual Gobierno de TODOS a través de la presión económica/financiera que pretende imponer una gran devaluación.
En este sentido, referentes del sector sojero explican que el Gobierno tuvo sobre la mesa una propuesta que incluía una baja de alrededor de 10 puntos de retenciones, pero que fue descartada de plano por el ministro Martín Guzmán. La explicación suena lógica: ante la endeble economía argentina, semejante recorte también impacta de lleno en la recaudación fiscal.
Según el informe de recaudación difundido por la AFIP correspondiente a septiembre, se evidenció una fuerte recuperación de los ingresos en concepto de derechos de exportación, que sumaron $46.359 millones, con un incremento interanual de 44%, el más importante después de marzo, cuando la recaudación por este concepto había subido 60 por ciento.
Lo cierto es que en paralelo quedaron stand by otros incentivos que podrían colaborar con el ánimo y el bolsillo del productor agropecuario. Uno de ellos es la posibilidad de descontar las facturas por compra de semillas y fertilizantes del impuesto a las Ganancias. Un punto que sobrevuela en el Gobierno pero que actualmente de la mano de la fiebre por el dólar tiene otras urgencias que atender.
Por su parte la industria aceitera continúa anotando declaraciones de ventas al exterior de soja y subproductos que a la fecha suman poco más de 1,8 millones de toneladas pero esa cifra podría estancarse en breve ante la poca disponibilidad de materia prima en el mercado.
En este marco, Néstor Roulet, productor agropecuario y exsecretario de Agregado de Valor, detalla que la industria aceitera, durante la primera semana de entrada en vigencia necesitó industrializar 1,5 millones de toneladas para cumplir con los envíos declarados pero solo compró en el mercado local unas 590.000 toneladas. Es decir, contaba con stock en sus silos.
El exfuncionario entonces afirma: “Esto deja claramente demostrado que la soja la tenía en su poder y gran parte comprada la industria de molienda de soja. Teniendo en cuenta la diferencia entre lo que tendría que haber comprado y lo que realmente compró, con un precio FOB Comprador Spot de u$s448 por tonelada observaremos que por esta acción la industria tuvo 20 millones de dólares en una semana”.