¿Irracionalidad o peligrosa estupidez? Caceroleros aglomerados frente a la Quinta de Olivos, sin respetar distanciamiento de 2 metros y en muchos casos con barbijos bajos, exponen a varios niños a contagiarse de coronavirus, en plena segunda ola con 25 mil contagios promedios diarios. ¿El motivo de esta peligrosa decisión?: oponerse al cierre por do semanas de la escolaridad semi-presencial, que anunció anoche el presidente Alberto Fernández, como parte de un paquete de nuevas restricciones que apuntan a bajar la cantidad de contagios, tal como sucede en todo el mundo.
Miserable irresponsabilidad. Decenas de madres –fundamentalmente- exponen a decenas de niños aglomerándolos con otras cientos de personas que sin respetar distanciamiento social, ni tampoco ningún tipo de protocolo en el peor momentos del rebrote del coronavirus, frente a la Quinta de Olivos, movilizados por dirigentes macristas, radiales y “libertarios”, que pretenden especular políticamente con la peor pandemia a nivel global, que en nuestro país –y al cierre de esta nota- ya produjo 2.629.156 positivos, de los cuales 2.300.232 se recuperaron y 58.925 argentinos fallecieron.