Durante aquella jornada del 13 de mayo de 1966 -inmortalizada en la obra de Rodolfo Walsh, “¿Quién mató a Rosendo?”-, se produjo un tiroteo en la antigua confitería La Real, ubicada por entonces frente a la Plaza Alsina en Avellaneda. Allí resultaron muertos el dirigente de la UOM, Rosendo García, y dos militantes de la Resistencia Peronista: Juan Zalazar y Domingo “El Químico” “El Viejo” o “El Griego”, Blajaquis, un trabajador curtidor. En su obra, Rodolfo Walsh, describió a Blajaquis como: “Un auténtico héroe de su clase”.
Domingo Blajaquis nació el 19 de julio de 1919, año en que se produjo la masacre de obreros conocida como “La Patagonia Trágica”, durante el gobierno del radical Hipólito Yrigoyen. Sus padres fueron Crispina Díaz y Juan Blajaquis.
Conocido como “El Griego”, por el origen de su apellido, “El Químico”, porque como trabajador curtidor manipulaba ácidos, y también porque fabricaba “caños” (explosivos) para las acciones que llevaba a cabo la Resistencia Peronista, integró el Partido Comunista (PC) hasta el fatídico año 1955, cuando un brutal bombardeo sobre la Plaza de Mayo, que mató a más de 400 personas entre ellos decenas de niños de escuela primaria, planeado por las Fuerzas Armadas en alianza con la Unión Cívica Radical (UCR), el Partido Comunista (PC), el Partido Socialista (PS), Conservadores y amplios sectores de la Iglesia Católica, propició el golpe de Estado contra el presidente Juan Domingo Perón.
Tras el golpe de Estado, Blajaquis, integró fue el jefe del “grupo Avellaneda” de Acción Revolucionaria Peronista (ARP), agrupación orientada por John William Cooke.
“… El Viejo estaba mordiendo una porción de pizza cuando la bala se le metió en el pecho, por el costado”, asegura Francisco Alonso tocándose debajo de su axila derecha.
Alonso estaba sentado en la otra punta de la misma mesa, a un metro, cuando se apagaba el 13 de mayo de 1966. “Ese tiro –agrega Alonso–, como todos los otros, vino de la mesa en donde estaba el Lobo Vandor con su troupe. Quedó sentado el Viejo, sangrando, muriendo”, narró el periodista y escritor Rodolfo Walsh, en “¿Quién mató a Rosendo?”.
Un rato después de los disparos en La Real, Blajaquis murió entrada la madrugada del 14 de mayo en el Hospital Fiorito, en Avellaneda, producto de una “herida de bala en tórax”, tal como firmó el doctor José Rodríguez Giménez.
En este día recordamos al compañero peronista y trabajador curtidor, Domingo Blajaquis, a 55 años de su asesinato. pic.twitter.com/uig6j5t5gc
— Walter Correa (@dipwaltercorrea) May 13, 2021