«A pesar de haber sido despedidos, seguimos con Patios Abiertos, ahí se ve lo que falta”

Constanza Wainszelbaum y Mariano Ezquiaga, trabajadores de la educación del Programa “Patios Abiertos”, despedidos por la gestión de Cambiemos a causa del brutal recorte del presupuesto educativo que impusieron el presidente Mauricio Macri y la gobernadora María Eugenia Vidal – en el caso de Constanza, además, fue desvinculada estando embarazada del hijo que tienen junto a Mariano, llamado Camilo- narraron a Mariano Moreno Noticias, la persistencia de su accionar en dicho programa, a pesar del desamparo político e institucional que atraviesan. Moreno es una un ejemplo más de la tragedia socio-económica que impuso la alianza Cambiemos en éstos cuatro años de gestión. Con la fuerza que dan las convicciones y el amor al pueblo, junto a la solidaridad de los vecinos del barrio, estos trabajadores de la educación aún sostienen “Patios Abiertos”, en el campito lindero a la Escuela 49; conocido establecimiento de cuya tragedia, ayer viernes, se conmemoró el primer aniversario.

-¿En qué situación se encuentra el programa “Patios Abiertos”?

Constanza: Patios Abiertos es un Programa socioeducativo que funciona los días sábados, al igual que otros programas como los Centros de Actividades Juveniles (CAJ), Centros de Actividades Infantiles (CAI) y las orquestas, que tienen el objetivo de generar un espacio de encuentro para que la escuela abra sus puertas a toda la comunidad, no solamente a los que van a la escuela 49 o a la escuela donde suceda Patios Abiertos, que está en varias escuelas. Lamentablemente este Programa, que es de inclusión e integración para que los chicos jueguen, coman y hagan actividades recreativas, fue recortado a partir de que asume la gestión de Cambiemos.

Mariano: Yo también soy un trabajador despedido del Programa Patios Abiertos que se hacía en la escuela 49. Quería comentar que hay un informe realizado por la Facultad de Filosofía y Letras de la UBA, en conjunto con otras universidades del conurbano, que analizaron el presupuesto educativo comparándolo entre el año 2016 y 2019, y hubo un recorte de los programas socioeducativos de trescientos siete millones de pesos que eran destinado a ellos en 2016, a treinta y cuatro millones de pesos en 2019, o sea que estamos hablando de un recorte del noventa por ciento. Un recorte brutal, donde antes había diez programas, ahora hay uno, y esto no sólo incluye a Patios Abiertos sino a los CAJ y CAI, orquestas, FINEs, en fin, en todos los programas socioeducativos que se fueron abriendo como políticas públicas durante las gestiones de Néstor Kirchner y Cristina Fernández, y que a partir del 2016 se recortaron de manera violenta, digamos.

Constanza: En este caso, yo trabajaba con Sandra Calamano (Vicedirectora de la escuela 49, fallecida tras la explosión ocurrida en 2 de agosto de 2018. N.E), antes de la explosión de la escuela 49, en Patios Abiertos y ya veníamos viendo el recorte y lo que pasaba con las orquestas que llevan y traen instrumentos, y ella estaba siempre luchando siempre por sostener estos espacios, y a partir de esta explosión junto con otra compañera, Vanesa, sostuvimos el espacio de Patios Abiertos en el campito que está junto a la escuela en momentos que estaba cerrada la escuela, porque los chicos seguían necesitando de ese lugar, esa referencia, y la verdad que durante tres meses los supimos sostener todos los sábados, junto a las mamás, a la comunidad organizada, en un momento de mucho dolor, de mucha incertidumbre, donde los chicos no entendían lo que había pasado, por qué no podían entrar a la escuela; se preguntaban nada más y  nada menos que por la vida y la muerte, y ahí estábamos para dar respuesta porque no solamente eran talleres para jugar, hacer videos o pintar, sino que eran talleres para aprender, reflexionar, compartir miedos y todo lo que sentían en ese momento, y luego de sostener eso y haber finalmente ingresado a la escuela, cuando pudimos ingresar, este año nos despidieron, y lo que hace esta gestión que es muy cínica es que no te dicen “te despedimos”, sino que “no te aceptamos el proyecto y lo cambiemos por otro”.

-¿En tu caso, estabas embarazada cuando te desvincularon del Programa Patios Abiertos, es así?

Constanza: Sí, sí, además la gravedad en tiempos de revoluciones feministas, esta gestión es una gestión que va siempre un paso atrás y fue así: me despidieron estando embarazada de cuatro meses, pero fue así, tuvieron el descaro de echarme embarazada.

-¿A pesar de esta situación continúan con el proyecto ustedes?

Mariano: Claro, lo que sucedió en ese momento cuando nos despidieron, esto fue a fines del mes de febrero, en el primer momentos nos sentimos muy tristes, porque es muy paralizante una situación como esa, pero hablando con Coco (Constanza) y nuestra otra compañera Vanesa, lo que decidimos fue volver a la lucha que habíamos dado en aquel campito durante tres meses y creímos que si pudimos hacerlo una vez, lo podíamos hacer nuevamente, tal vez en ese caso con un conflicto que estaba mucho más frío que en el primer momento donde  estaba muy movilizada toda la comunidad de Moreno en general, aquel sábado, que fue dos de marzo, una fecha de conmemoración de la explosión, nosotros dimos Patios Abiertos con la sorpresa de que fueron muchísimos los chicos y chicas que se acercaron al campito, como en aquellos otros momentos, y a partir de eso reiteramos una jornada tras otra, y este sábado tres de agosto, se va a cumplir la jornada número veintidós, o sea, van setenta y dos sábados que nosotros estamos ahí, con frio, con calor, con lluvia, sin ayuda de las estructuras burocráticas ni sindicatos, la verdad tuvimos que pelear una lucha muy difícil, pero con mucha solidaridad por parte de los vecinos, de organizaciones sociales y políticas y un montón de otros actores que sí se acercaron y que permitieron una construcción colectiva y que ya es parte…

Constanza: …del folclore, ya se instaló como “la fiesta de Patios del sábado a la mañana”, hay helada pero igual hay chicos que ya están jugando a la pelota a las ocho y media de la mañana, y es muy difícil que eso se rompa, se quiebre; ya nos transciende, es mucho más que Patios Abiertos, porque en ese campito lo que se visibiliza son todas las demandas incumplidas por esta gestión neoliberal y todo lo que está faltando, porque no sólo falta ese espacio de encuentro y juegos, sino que falta comida, laburo, hay pibes que van con hambre por eso ahí hacemos desayuno, hacemos ollas populares.

Mariano: Nunca les faltó a ninguno de los chicos y chicas que se acercan ahí a Patios Abiertos, un desayuno, un almuerzo, una olla popular, me acuerdo que durante las Pascuas, todos se llevaron un huevo de Pascua; siempre fue a pulmón que lo hicimos. En la jornada número seis, se acercaron dos operadores de Cambiemos en Moreno, para amenazarnos. Se acercaron al campito y nos exigieron que bajemos la bandera de Patios Abiertos, nos dijeron que “eso no era Patios Abiertos” lo que nosotros estábamos haciendo, que Patios Abiertos era de ellos y nos dijeron que nadie nos conocía, todo con un tono muy amenazante. Afortunadamente en ese momento estaba llegando Diego Rodríguez, el hermano de Rubén Rodríguez (auxiliar de la escuela 49, fallecido tras la explosión. N.E), que habíamos podido contactar unos días antes; una persona extremadamente humana y muy solidaria, y ese día había llegado con facturas para darle a los chicos para que desayunen, porque nosotros le habíamos dicho que a veces nos faltaba para el desayuno, y en ese momento vio la situación y le pidió a esos dos operadores de Cambiemos que se retiraran del predio, y por supuesto que al verlo a Diego, que es una figura pública, se fueron y afortunadamente nunca más volvieron.

-¿Qué cantidad de chicos están yendo a las actividades que realizan en este momento?

Mariano: Fue muy variable a lo largo de estas veintidós jornadas, porque hubo días donde el clima acompañó, otros que no, pero en promedio van entre cuarenta y cincuenta chicos entre cuatro y quince años, y en algunas fechas especiales, hemos llegado a tener setenta chicos, y a veces las manos no alcanzan porque además ser nosotros tres trabajadores despedidos, tenemos una madre que nos cocina y a la que consideramos una trabajadora parte del equipo porque estaba ahí desde el primer momento, y muchos vecinos colabora también, un vecino nos presta el equipo de música, otros el baño, para que los chicos puedan ir al baño, y este vecino era un alumno de carpintería de Rubén Rodríguez.

-¿Se podría afirmar que esta labor que ustedes realizan es de resistencia cultural y educativa?

Mariano: Sí, es un caso de resistencia y sobretodo un cuestionamiento a las estructuras burocráticas, porque nos es muy difícil visibilizar todo lo que nosotros estamos haciendo, justamente por no contar con el apoyo de las jerarquías sindicales o mismo con las escuelas, por eso nosotros intentamos constituir un nuevo sujeto colectivo que represente a todos los programas socioeducativos, por supuesto que no pretendemos embanderarnos de nosotros mismos, nada por el estilo, es con muchísima humildad que lo decimos, pero sí, es una lucha dirruptiva.

Constanza: También lo que sucede, es que ante esta lucha es como que la comunidad educativa comienza a ampliarse, se vuelve más heterogénea, entonces la comunidad educativa no solamente es el docente que va todas las semanas, sino que en esta lucha que es lo que particularmente sucede a partir de lo de Sandra y Rubén, en Patios Abiertos, se suma –como decíamos- todos estos actores: los talleristas de Patios Abiertos, los chicos y las madres y los padres, y como todo empieza a tener su propia voz en la lucha por un cambio en la educación pública y una batalla cultural que vale la pena seguir dándola.