En momentos que la imagen positiva del presidente de Brasil, Jair Boslsonaro, cayó 15%, fue detenido por corrupción su antecesor, Michel Temer, en el marco de la causa denominada «Lava Jato». El -ahora preso- ex Mandatario llegó al gobierno tras el golpe de Estado blando, que quitó de sus funciones a la ex presidenta elegida por el voto popular, Dilma Rousseff.
La detención del ex presidente brasilero, Michel Temer, en el marco del caso «Lava Jato», pone en vilo a la política del país hermanom y enciende alarmas en el gobierno de coalición PRO-UCR, que encabeza aquí, el empresario-presidente Mauricio Macri.
La noticia del inevitable destino presidiario de Michel Temer, golpea directametne al gobierno de Jair Bolsonaro, quien a poco más de tres meses de haber asumido su mandato, su imagen positiva cayó 15%, al igual que la de su Minsitro de Justicia «estrella», Sergio Moro, quien aplicó la proscripción del líder popular Inacio «Lula» Da Silva. Operación político/judicial de vital importancia para el triunfo del actual gobierno. La crisis política en Brasil aumenta a pasos agigantados.