En libertad condicional desde el 15 de diciembre de 2023, el ex militar Horacio Losito tiene tres condenas por crímenes de lesa humanidad en su paso por el Ejército durante la última dictadura cívico-militar-eclesiástica. Fue amigo del padre de la actual vicepresidente, Victoria Villarruel, con quien combatió en las Islas Malvinas. Con el permiso del ministro de Defensa, Luis Petri, fue recibido el pasado martes 27 de febrero con honores en el Regimiento de Infantería de Monte 30, en Misiones. Mirá el video abajo.
El represor Horacio Losito tiene tres condenas por crímenes de lesa humanidad: una a prisión perpetua por la masacre de Margarita Belén y dos a 25 años dictadas en Corrientes. Fue detenido en octubre de 2004. Desde abril de 2020 estaba en prisión domiciliaria, beneficio al que accedió durante la pandemia. Según el cómputo que practicó el Poder Judicial, el 10 de noviembre ya estaba en condiciones de acceder a la libertad condicional porque había completado los dos tercios de su sentencia –gracias también a que se le redujeron diez meses de reclusión por los cursos que hizo mientras estuvo preso.
Según difundieron medios locales, Losito fue a ese regimiento a visitar a su hijo y fue recibido por soldados en formación y por las autoridades de la unidad militar. En un video difundido por cuentas que celebraron que el represor estuviera en libertad, se lo ve dar dos campanadas y gritar “Viva la Patria”.
“Una emotiva recepción recibió el Coronel VGM Horacio Losito en el Regimiento de Infantería de Monte 30. El Coronel Losito ha concurrido a esa Unidad a visitar a su hijo. El Coronel Losito recientemente recuperó su libertad luego de 19 años preso al igual que muchos otros camaradas”, señaló la web de defensa de genocidas “Prisionero en Argentina” y compartió el video del momento.
Un viejo amigo de la familia Villarruel
En 1982, Losito combatió en Malvinas. Lo hirieron en la cabeza. El padre de la actual vicepresidenta, Eduardo Marcelo Villarruel, lo propuso como testigo presencial cuando hizo un reclamo para que algunos de sus hombres de la Compañía de Comandos 602 fueran reconocidos por el Ejército Argentino. Losito se retiró en 1986 y después estuvo cerca de los sectores carapintadas que atentaban contra los gobiernos democráticos y reclamaban impunidad por los crímenes cometidos durante los años del terrorismo de Estado. Con el tiempo, se recibió de abogado.