Por Maximiliano Borches. Ya sea por acción del destino, o de la providencia, solo un puñado de hombres y mujeres se transforman en personas clave de la historia, tanto por la contundencia de sus acciones, como por la fortaleza transformadora de sus pensamientos. María Eva Duarte -Evita Perón para su pueblo-, protagonizó junto a Juan Perón la revolución justicialista que conquistó derechos que las y los argentinos mantenemos y gozamos hasta el día de hoy. A su vez, fue una de las mujeres más destacadas de nuestra historia nacional. Su lucha al servicio de los más humildes de la patria, de los “descamisados”, inauguró una Argentina nueva. Hoy, a 103 de su nacimiento, desde Mariano Moreno Noticias brindamos nuestro más humilde y profundo homenaje.
“El amor alarga la mirada de la inteligencia”, escribió Evita en “La Razón de mi Vida” (página 40). Amor e inteligencia van de la mano cuando lo que se construye es una empresa de gigantes, capaz de transformar la caótica realidad de millones de compatriotas, oprimidos y despreciados por minorías “privilegiadas”. En Argentina, esa transformación la llevaron adelante Juan Domingo Perón y Evita Perón, a partir de 1943 (el primero solo) y con fuerza arrolladora a partir del mítico 17 de octubre de 1945 (ambos)
Evita nació el 7 de mayo de 1919 en la localidad bonaerense de Los Toldos. Desde allí emigró a la Ciudad de Buenos Aires con el deseo de ser actriz, y lo consiguió.
En 1944 conoció al entonces Coronel Juan Domingo Perón, en medio de la campaña solidaria por los afectados del terremoto en San Juan. De ese encuentro nació una de las historias de amor más profundas, y fundamentalmente, se constituyó una de las parejas más destacadas de la historia nacional.
Por una extraña casualidad, o una predestinación del destino o de la providencia, tanto el peronismo, como las fuerzas populares y federales de nuestra historia nacional, se vieron potenciadas por parejas que fueron míticas en sus desarrollos transformadores: Juan Manuel de Rosas y Encarnación Ezcurra, Evita y Juan Domingo Perón, Néstor Kirchner y Cristina Fernández.
“Yo no me dejé arrancar el alma que traje de la calle, por eso no me deslumbró jamás la grandeza del poder y pude ver sus miserias. Por eso nunca me olvidé de las miserias de mi pueblo y pude ver sus grandezas“, Evita
En el año 1947, impulsó y logró la sanción de la ley de sufragio femenino, con la que se consiguió la igualdad política entre hombres y mujeres, a la vez que consiguió también la igualdad ente los cónyuges y la patria potestad compartida, a través el artículo 39 de la Constitución Nacional de 1949, derogada por golpe cívico-militar de 1955, producido tras los criminales bombardearon sobre la Plaza de Mayo y sus alrededores, que dejaron más de 400 argentinos muertos, entre ellos, decenas de niños de escuela primaria.
El 8 de julio de 1948, Evita creó la Fundación Eva Perón, desde donde llevó a cabo una destacada labor de inclusión social, verdaderamente transformadora, que logró sustituir el concepto de «caridad» tan utilizado por la Iglesia como por los sectores de la oligarquía, por el de «solidaridad».
Más tarde, en 1949, creó el Partido Peronista Femenino, que presidió hasta el día de su temprano fallecimiento producto de un cáncer fulminante: el 26 de julio de 1952, a las 20:25hs, día en que pasó a la inmortalidad.
Hoy, a 103 años de su nacimiento, se cumplió uno de sus deseos: varias generaciones tomaron (y tomamos) su nombre y lo llevaron (y lo llevamos) como bandera a la victoria.