En enero de 2024, el Índice de producción industrial manufacturero mostró además una variación negativa de 1,3% frente a diciembre en la serie desestacionalizada. Además, el fuerte retroceso en las ventas -en febrero -25,5%- y el bajo nivel de actividad industrial pueden traducirse en una suba del desempleo.
La industria sufrió una nueva fuerte caída en enero, la octava en forma consecutiva, al despomarse un 12,4% respecto a igual mes de 2023, en medio de una creciente contracción económica y galopante inflación, informó este miércoles el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC).
En enero de 2024, el Índice de producción industrial manufacturero (IPI manufacturero) mostró además una variación negativa de 1,3% frente a diciembre en la serie desestacionalizada.
Por otra parte, las ventas minoristgas pymes se desplomaron un 25,5% en febrero y acumularon un declive del 27% en el primer bimestre del año, según la información relevada por la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME). A este escenario se suma que la actividad económica muestra caídas en casi todos sus sectores, con lo que se consolida la performance recesiva de la economía.
Para ver números parecidos hay que remontarse a la época de pandemia cuando el sector de la construcción marcó una caída de 76,3% en abril y 48,5% en mayo de 2020, los dos meses completo de encierro estricto por el Covid-19. Sobre los puestos de trabajo también se encienden las alarmas.
Las mismas que habían encendido desde CAMARCO cuando a principios de febrero en oportunidad de celebrar el Consejo Federal de la Construcción declararon la emergencia de la actividad en todo el país. Comienza a registrarse una baja de 3,2% con respecto al mismo mes del año anterior en la cantidad de puestos de trabajo.
Los datos del consumo aparente de los insumos para la construcción en enero de 2024 muestran, con relación a igual mes del año anterior, bajas significativas: 61,9% en asfalto; 40,6% en yeso; 38,6% en hierro redondo y aceros para la construcción; 28,6% en hormigón elaborado; 19,9% en cemento portland; 18,5% en mosaicos graníticos y calcáreos; 18,1% en ladrillos huecos; 12,6% en cales; 10,7% en pisos y revestimientos cerámicos; 10,4% en pinturas para construcción; 9,1% en el resto de los insumos (incluye grifería, tubos de acero sin costura y vidrio para construcción); 7,3% en placas de yeso; y 3,7% en artículos sanitarios de cerámica.
Respecto de la proyección para los próximos meses, los resultados obtenidos por la encuesta cualitativa de la construcción, realizada a grandes empresas del sector, muestran expectativas desfavorables con respecto al nivel de actividad esperado para el período febrero-abril de 2024.
En efecto, el 52,5% de las empresas que realizan principalmente obras privadas prevé que el nivel de actividad del sector no cambiará durante los próximos tres meses, mientras que 41,6% estima que disminuirá y 5,9% que aumentará e indican como principales causas la caída de la actividad económica (30,1%) y la inestabilidad de los precios (28,5%).
En tanto que entre las empresas dedicadas fundamentalmente a la obra pública, el pesimismo es aún mayor: el 76,0% opina que el nivel de actividad disminuirá durante el período febrero-abril de 2024, mientras que 22,1% cree que no cambiará y 1,9% que aumentará e indican como principales causas la caída de la actividad económica (28,0%) y los atrasos en la cadena de pagos (24,4%).