Por Maximiliano Borches. Finalizado el primer tramo del debate (o mejor dicho “exposición”) presidencial, hubo dos hechos clave: Alberto Fernández (Frente de Todos) se probó el traje presidencial ante millones de televidentes en todo el país, en tanto que el empresario-presidente, Mauricio Macri, en plena retirada y con su destino sellado en la derrota, desplegó sus últimas reservas de cinismo, disparando oprobiosas mentiras. Actitud que lo caracteriza desde que decidió dedicarse a la política. Mirà el video al final e la nota.
La diferencia sustancial entre los debates del 2015 y el de anoche, es la maduración de un pueblo que ante la dramática situación social, laboral y económica que atraviesa en estos últimos tres años, ya no cree en el despliegue manipulador, cínico y profundamente mentiroso del empresario-presidente, Mauricio Macri y su entorno.
En esta etapa, las mentiras que dispara Macri caen en saco roto. No sólo por la contundencia agobiante de la realidad, sino porque también les falta intensidad. Parece que son pocos los que eligen auto-convencerse de ese país de fantasía que el hijo del fallecido empresario Franco Macri, intenta describir entre balbuceos, energía fingida y esa sensación de tristeza y derrota que lo atraviesa -y que seguramente en el plano de su fantasía- el Presidente confunde con alguna de las formas de la esperanza.
«No me preocupa tanto el gasto público cuándo se habla de ampliar derechos. Cada vez que Argentina amplió derechos hizo una mejor sociedad. Yo voy a hacer eso.»
Por otro lado, Alberto Fernández, no sólo convoca consensos ante cada aparición pública que realiza, aplicando en cada acción política, una de las últimas máximas del líder popular y tres veces presidente, Juan Domingo Perón: “Para un argentino, no hay nada mejor que otro argentino”. Sino que además, con sencillez supina, aborda las verdaderas necesidades populares, ofreciendo esas respuestas que se necesitan escuchar.
Por lo demás, el resto de los candidatos a presidente que participaron del debate, Roberto Lavagna, José Luis Espert, José Gómez Centurión y el trotskista Nicolás del Caño, sólo se disputan el olvido.
Los principales ejes de la exposición de Alberto Fernández (Frente de Todos):
Para los usureros todo, para la gente nada
«Presidente, si le preocupa la salud, le cuento que el presupuesto en su gestión cayó un 23%. Usted no lo entiende porque sus privilegios son otros, por eso los intereses de la deuda aumentaron un 70%. Para los usureros todo, para la gente nada.»
Entre todos vamos a poner a la Argentina de pie
«Estoy seguro de que entre todos y todas podemos cambiar la Argentina, podemos ponerla de pie. Ese es el compromiso que tenemos, darle trabajo a la Argentina. Yo se que cuento con ustedes, cuenten conmigo.»
Derechos Humanos
«Acá parece que hay gente que piensa que los derechos humanos son un curro, otros que el genocidio no existió. (…)
A esta altura de los acontecimientos los derechos humanos no pueden ser otra cosa que un imperativo moral de la sociedad.»
Ampliar derechos
«No me preocupa tanto el gasto público cuándo se habla de ampliar derechos. Cada vez que Argentina amplió derechos hizo una mejor sociedad. Yo voy a hacer eso.»
Inversión en educación, ciencia y tecnología
«El Presidente sigue diciendo disparates. El presupuesto educativo desde 2015 a hoy cayó un 40% y el de ciencia y tecnología cayó un 43%. Si tanto ve ahí el futuro, presidente, apueste un poco más.»
El valor de la educación pública
“Me gustaría que estos liberales hubieran aprendido de Alberti y Sarmiento el valor de la educación pública.»
Colectivo feminista
«De todas las que demandas han aparecido en los últimos tiempos sin duda el colectivo feminista es el que más debe llamar nuestra atención. Millones de mujeres que pusieron sobre la mesa, no sólo los efectos de la violencia de género, sino también la desigualdad que padecen. Vamos a crear el Ministerio de la Mujer, la Igualdad y la Diversidad.»
Reviví el debate: