Washington garantizó los depósitos del Silicon Valley Bank y el Signature Bank, pero el efecto contagio no ha terminado, con el First Republic Bank en el punto de mira. El pasado viernes, una “estampida bancaria” dio un golpe mortal al Silicon Valley Bank forzando su quiebra después de que la Reserva Federal de EE. UU. subiera los tipos de interés. Ahuyentó de esta manera a los potenciales inversores de la institución financiera conocida por sus relaciones con las empresas emergentes o start-ups tecnológicas de mayor expansión mundial y, también, al capital riesgo. Repercusión en las Bolsas del planeta.
Su caída supone la mayor quiebra de una institución financiera estadounidense desde que Washington Mutual se hundiera en el pico de la crisis financiera de 2008.
Esto es lo que hay que saber sobre las casas de lo ocurrido, quiénes han sido los más perjudicados y si puede afectar o no al sistema bancario general de Estados Unidos y del resto del mundo.
La Reserva Federal de EE. UU. aumenta los tipos de interés
El SIlicon Valley Bank ya se había visto seriamente afectado por la caída de las acciones de empresas tecnológicas durante el año pasado, así como por el agresivo plan de la Reserva Federal para aumentar los tipos de interés para combatir la inflación.
El banco había comprado miles de millones de dólares en bonos en los dos pasados años, usando los depósitos de los clientes de la misma forma en la que operaría normalmente cualquier otro banco.
Estas inversiones son habitualmente seguras. Pero su valor cayó porque pagaban intereses más bajos que los que brindaría un bono similar emitido en el entorno actual de tasas de interés más altas.
Normalmente, eso no supondría un problema porque los bancos los suelen mantener durante mucho tiempo, a menos que tengan que venderlos por alguna situación de emergencia.
Los inversores de Silicon Valley se vieron cada vez más cortos de efectivo
Pero los clientes de Silicon Valley eran sobre todo start-ups y otras empresas dedicadas a la tecnología que comenzaron a necesitar efectivo durante el año pasado.
La financiación del capital riesgo se estaba acabando: las compañías no eran capaces de conseguir rondas adicionales de financiación para negocios no rentables, por lo que tenían que recurrir a sus fondos existentes, a menudo depositados en el Silicon Valley Bank, ubicado en el centro del universo de las empresas emergentes tecnológicas.
Por lo que los clientes de Silicon Valley comenzaron a retirar sus depósitos.
Al principio no supuso un gran problema. Pero los movimientos empezaron a requerir que el banco comenzara a vender sus propios activos para cumplir con las solicitudes de retirada de los clientes.
Silicon Valley Bank vendió su cartera de bonos con pérdidas
Como los clientes de Silicon Valley eran mayormente grandes negocios y gente rica, posiblemente temieran la quiebra del banco dado que sus depósitos eran superiores a los 250 000 dólares (234 575 euros). Es decir, el límite impuesto por el Gobierno de Estados Unidos para el seguro de los depósitos.
Esto obligó a vender bonos normalmente seguros con pérdidas, que se fueron sumando hasta el punto de que el banco se declaró insolvente.
Intentó captar capital adicional a través de inversores externos, pero fue incapaz de dar con ellos.
La estampida bancaria hundió el barco
El sofisticado banco centrado en las tecnológicas fue derribado por una de los problemas más antiguos de la banca y una de las escasas formas en las que sin duda se puede hundir una institución de este tipo: la estampida.
Los reguladores bancarios no tuvieron más remedio que embargar los activos del Silicon Valley Bank para protegerlos, junto a los depósitos aún existentes.
@federalreserve @USTreasury @FDICgov issue statement on actions to protect the U.S. economy by strengthening public confidence in our banking system, ensuring depositors' savings remain safe: https://t.co/YISeTdFPrO
— Federal Reserve (@federalreserve) March 12, 2023
¿Qué pasará ahora?
En este momento, los especialistas no creen que los problemas se extiendan al sector bancario en general. Podría haber algunos focos de intestabilidad causados por esta cuestión, como se ha visto en la bajada en el mercado de criptomonedas de la mañana del pasado sábado. Pero ya mostró señales de recuperación a lo largo de ese día.
El Silicon Valley Bank era enorme, pero tuvo una función única de prestar servicio casi exclusivo al mundo tecnológico y a empresas respaldadas por capital riesgo. Trabajó mucho con una parte concreta de la economía que sufrió un duro golpe el año pasado.
Otros bancos están mucho más diversificados a lo largo y ancho de múltiples sectores, bases de clientes y geografía.
De todas formas, podría haber repercusiones económicas, sobre todo en el sector de las empresas emergentes tecnológicas en Estados Unidos, si el dinero que actualmente se mantiene en el Silicon Valley Bank no pudiera ser liberado rápidamente.
El Gobierno de Estados Unidos sale al rescate tras la quiebra de Silicon Valley Bank
El Gobierno de Estados Unidos sale al rescate tras la quiebra de Silicon Valley Bank. Con el objetivo de frenar cuanto antes lo que podría ser una importante crisis bancaria, los reguladores estadounidenses se comprometieron este domingo a proteger por entero los depositos de los clientes del SVB, garantizando igualmente el acceso a ese dinero.
Lo mismo sucede con el Signature Bank, con sede en Nueva York, que también era cerrado el domingo ante el «riesgo de contagio sistémico».
A través de su cuenta de Twitter, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, se comprometía a hacer rendir cuentas a los responsables de lo que no dudó en calificar de «desastre», a la vez que anunciaba nuevos esfuerzos para reforzar tanto la supervisión como la regulación de los grandes bancos.
El SVB, con sede en California (EEUU), anunció el miércoles pasado que iba a buscar una ampliación de capital para afrontar sus dificultades financieras, que le habían llevado a deshacerse de inversiones por valor de unos 21 000 millones de dólares.
El anuncio llevó a muchos clientes a retirar sus fondos, tras lo que los reguladores tuvieron que cerrar el banco el viernes por falta de liquidez, disponiendo asimismo medidas para garantizar la protección de todos sus depósitos asegurados.
Posteriormente se hundía la cotización bursátil de la compañía, lo que a su vez afectó al sector bancario en general, tanto en Estados Unidos como en otros países.
Efectos secundarios
La crisis del SVB ha traído consigo diferentes movimientos y reacciones en el mundo financiero. Este lunes, el banco HSBC compraba la subsidiaria británica del Silicon Valley Bank (SVB), a través de un rescate privado facilitado por el Gobierno del Reino Unido y el Banco de Inglaterra. Lo hacía por la simbólica cifra de una libra.
Esta «venta privada» se lleva a cabo sin que «los contribuyentes» británicos tengan que asumir este rescate, precisó el ministro británico de Economía, Jeremy Hunt.
«Esta mañana, el Gobierno y el Banco de Inglaterra facilitaron una venta privada de Silicon Valley Bank UK al HSBC. Los depósitos estarán protegidos, sin apoyo de los contribuyentes», dijo Hunt en un mensaje colgado en su cuenta de Twitter.
«Dije que cuidaríamos de nuestro sector tecnológico y hemos trabajado con urgencia para cumplir esa promesa», agregó.
Se aseguran los servicios bancarios
En un comunicado remitido a la Bolsa de Hong Kong, donde cotiza, el HSBC, el mayor banco de Europa y que opera principalmente en el mercado asiático, estima en unos 1 400 millones de libras (1 581 millones de euros) el capital tangible de la filial británica del SVB.
Los clientes y las empresas que tienen depósitos en el SVB UK podrán acceder a ellos de manera normal, indicó el Gobierno.
En tanto, en un comunicado, el Banco de Inglaterra señaló que, tras consultar con el departamento del Tesoro y los reguladores del sector financiero, la entidad emisora inglesa «ha tomado la decisión de vender Silicon Valley Bank UK Limited (SVBUK), la filial británica del banco estadounidense, al HSBC UK Bank Plc (HSBC)».
«Esta medida se tomó para estabilizar al SVBUK, asegurando la continuidad de los servicios bancarios, minimizando la interrupción del sector tecnológico del Reino Unido y respaldando la confianza en el sistema financiero», agregaba la nota del banco.
«El dinero de todos los que tienen depósitos en el SVBUK está seguro y protegido como resultado de esta transacción. El negocio de SVBUK seguirá operando normalmente» y «todos los servicios seguirán funcionando con normalidad y los clientes no deberían notar ningún cambio», precisaba el Banco de Inglaterra.
Con información de Bloomberg, Euronews, AFP, Reuter